Diario de un maquero, día 15
Hasta aquí ha llegado la experiencia, el balance es positivo, aunque la realidad no es exactamente como uno la imagina cuando oye a los maqueros hablar de sus ordenadores.
Y ojo, digo que no es como la imagina porque no es ni mejor ni peor, simplemente es diferente.
En estos 15 días no he conseguido llegar a sentirme realmente como un maquero, sino más bien como un infiltrado, tal vez porque sabía que esto del MAC OS era temporal y tarde o temprano iba a volver al pc con windows.
De entre les cosas positivas que ya he dicho en anteriores páginas del diario destacaría el haber llegado al final del camino sin haber sufrido ni un sólo «cuelgue».
Añadiría que me fascina la rapidez que tiene el MacBook para encenderse y apagarse, al igual que para conectarse a la wifi y a internet. También es de destacar la facilidad con la que se incorpora a una red doméstica con otros equipos windows de manera totalmente automática, lamentablemente no puedo decir lo mismo de las impresoras compartidas, ya que no he conseguido detectarlas.
También acabo el periplo sin saber por qué me cambia el zoom del navegador safari al utilizar el touchpad, ni tampoco por qué el portapapeles no me copia y me paga todo el texto seleccionado en algunas ocasiones.
Se me quedan cosas por probar como el scrobbler de lastfm (ni siquiera he mirado si existe para MAC, supongo que sí).
Tampoco he conseguido que me aparezcan las canciones que estoy escuchando en spotify en el estado del messenger, una tontería lo se, pero estoy acostumbrado.
Pues como digo una buena experiencia que no me importaría repetir si surge la ocasión.
Sincronización automática del pendrive con el PC
Os quería presentar una herramienta que he descubierto hace muy poco tiempo y que me ha ayudado mucho a llevar siempre el último archivo en el que he trabajado en mi pendrive.
La herramienta se llama GoodSync , es gratis, está en castellano y permite la sincronización de dos carpetas en diferentes dispositivos, ya sean carpetas locales, de red, FTP, unidades USB, etc.
Admite discos con formato NTSC y FAT32 y está disponible para Windows 2000/XP/2003/Vista.
El funcionamiento es muy sencillo, una vez instalado y ejecutado el programa tendremos deberemos colocar en la ventana de la izquierda una carpeta y en la ventana de la derecha la otra (al estilo programa de grabación de CD/DVD o cliente FTP). Hacemos clic en analizar y posteriormente en sincronizar y eso es todo, así de sencillo.
Podemos crear todas las tareas que queramos, programarlas para que sincronicen cada cierto tiempo, al detectar las unidades conectadas, al desconectar, en un sentido, en otro o en ambos, etc.
Por supuesto el programa se encarga de comparar dos archivos con el mismo nombre y siempre conserva el más reciente por defecto, cuidado con esto, aunque creo que también es configurable si lo que deseamos es tener un control de revisiones recomiendo guardar el archivo con diferente nombre antes de sincronizar.
En definitiva, un programa muy interesante a llevar en nuestro lápiz USB para los que utilizamos varios ordenadores en diferentes lugares y no queremos tener que estar constantemente acordándonos de grabar en dos lugares (PC y USB).
Yo por ejemplo tengo configurada una tarea para sincronizar el pen siempre que lo conecto y lo desconecto.